El perdón de Dios
Dios nos habla y se revela así mismo a lo
largo de la historia de la Salvación. En su actuar manifiesta cómo es y lo que
quiere para nosotros, se compadece de los hombres hasta con ternura materna.
Isaías. Profeta que vivió en el siglo octavo antes
de Cristo, por los años 750 antes de Cristo.
Dice en el capítulo 49, versículos 15 y 16:
Isaías, que representaba a Sión,
su pueblo, dijo: Jehová, mi Dios,
me ha desamparado, y mi Señor se ha olvidado de mí.
Y Dios le contesta: ¿Acaso se olvidará la mujer de su niño
de pecho y dejará de compadecerse del hijo de su vientre? Pues, aunque se
olviden ellas, yo no me olvidaré de ti.
Fijémonos con que amor lo dice Dios, cómo se entrega a
los hombres, que son sus hijos. Hasta con amor materno. Es que Dios manifiesta
siempre ternura y amabilidad.